Modificación de Conducta
MODIFICACIÓN Y TERAPIA DE CONDUCTA
Introducción
La modificación de conducta tiene como
objetivo promover el cambio a través de técnicas de intervención
psicológicas para mejorar el comportamiento de las personas, de
forma que desarrollen sus potencialidades y las oportunidades
disponibles en su medio, optimicen su ambiente, y adopten actitudes
valoraciones y conductas útiles para adaptarse a lo que no puede
cambiarse. El área de la modificación de conducta es el diseño y
aplicación de métodos de intervención psicológicas que permitan el
control de la conducta para producir el bienestar, la satisfacción
y la competencia personal.
Caracterización de la modificación de conducta
Según Labrador, cabe definir la
modificación de conducta como aquella orientación teórica y
metodológica, dirigida a la intervención que, basándose en los
conocimientos de la psicología experimental, considera que las conductas
normales y anormales están regidas por los mismos principios, que trata
de desarrollar estos principios y aplicarlos a
explicar conductas específicas, y que utiliza procedimientos y técnicas
que somete a evaluación objetiva y verificación empírica, para disminuir
o eliminar conductas desadaptadas e instaurar o
incrementar conductas adaptadas. Esta definición pone de relieve las
características más fundamentales del enfoque:
a) La fundamentación en la psicología experimental
b) La aplicación tanto al campo clínico
como no clínico (por la similitud de principios que gobiernan la
conducta normal y anormal)
c) La insistencia en la evaluación objetiva
d) El énfasis en la instauración de repertorios conductuales.
De todas estas características cabria
destacar como definitorias la fundamentación de los métodos empleados en
la investigación psicológica controlada, así como en
énfasis en la evaluación objetiva de las intervenciones.
En el presente y en el desarrollo histórico de la modificación de conducta podemos distinguir cuatro principales orientaciones:
a) El análisis conductual aplicado.
b) La conductista mediacional.
c) El aprendizaje social.
d) El cognitivo-conductual.
Orientaciones actuales en modificación de conducta
1) Análisis conductual aplicado: se basa en la aplicación del análisis experimental de la conducta a los problemas de importancia social, aparece
también bajo la denominación de análisis funcional de la conducta o enfoque operante.
Las principales características de este enfoque son:
1. Se centra en las conductas observables directamente.
2. La conducta está controlada por el ambiente.
3. El objetivo de estudio es la conducta
de organismo individual y el enfoque metodológico es el análisis
experimental de la conducta.
4. Las técnicas basadas en este enfoque son las de condicionamiento operante.
5. El campo de aplicación de este
enfoque es muy amplio pero se pueden destacar dos áreas preferentes: a)
el tratamiento de personas con capacidades cognitivas
limitadas y b) la modificación de ambientes sociales o institucionales.
6. El tratamiento debe evaluarse tanto a nivel experimental como clínico y social.
2) Orientación conductual mediacional: también se le denomina enfoque E-R neoconductista o mediacional, por el énfasis que pone en las variables
intermedias o constructos hipotéticos en la explicación de la conducta.
Los rasgos principales de esta orientación son los siguientes:
1. Se da una especial importancia a los constructos hipotéticos.
2. Los procesos cognitivos tales como
imágenes, la mediación verbal u otros semejantes se tienen en cuenta en
la teoría y en la terapia.
3. El campo de aplicación de este
enfoque se centra especialmente en trastornos relacionados con la
ansiedad, obsesiones, agorafobias, trastornos sexuales y otros
trastornos.
4. Las técnicas de tratamiento que se utilizan se basan en el condicionamiento clásico.
3) Orientaciones basadas en el aprendizaje social:
esta orientación considera que la determinación del comportamiento
depende de los estímulos
ambientales, físicos y sociales, de procesos cognitivos y patrones de
conducta del sujeto, que a su vez modifica su propio medio.
Las características fundamentales de esta orientación son los siguientes:
1. La regulación de la conducta depende
de tres sistemas: a) los estímulos externos que afectan a la conducta.,
b) las consecuencias de la conducta y c) los procesos
cognitivos mediacionales.
2. La influencia del medio sobre el
sujeto está afectada por los procesos cognitivos que determinan la
percepción o interpretación de aquél y/o variables del
sujeto.
3. El énfasis en el constructo de
autoeficacia, que se refiere a los juicios personales acerca de la
propia capacidad para realizar la conducta necesaria para obtener
un resultado deseado.
4. El énfasis en la autoregulación y autocontrol.
5. En relación a las técnicas empleadas
integra los métodos basados en el condicionamiento clásico y operante
con el aprendizaje vicario y los métodos de
autorregulación.
4) Orientación cognitivo-conductual: esta orientación parte del supuesto de que la actividad cognitiva determina el comportamiento.
Las principales características de esta orientación son las siguientes:
1. El cambio conductual se halla mediado por las actividades cognitivas.
2. La aceptación del determinismo recíproco entre el pensamiento, el ambiente y la conducta.
3. La terapia está diseñada para ayudar al paciente a identificar, probar la realidad y corregir creencias disfuncionales.
4. Las técnicas aplicadas en este
enfoque son la reestructuración cognitiva, solución de problemas,
entrenamiento autoinstruccional.
5. La relación terapéutica es colaborativa y se enfatiza el papel activo del cliente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario